Escribe Pablo Frisch.
CUIDADO! ¿SE VIENE UNA NUEVA “IMPLOSIÓN” DE BARILOCHE?
El Turismo es el más rápidamente transable de los bienes y servicios habituales: no se requiere un período previo de siembra y cosecha, ni de industrialización, para su intercambio, dado que las personas viajan, van ó vienen, con la sola mediatez de su propia decisión. Y cuando ésta última está incentivada por una nueva paridad cambiaria, es decir una disminución importante en los costos relativos, en nuestro caso para quien viaja del exterior a la Argentina, la reacción es casi inmediata. Así pudimos ver como Bariloche ingresó de repente en una nueva (4ª ó 5ª) etapa de crecimiento, esta vez sin precedentes, debido al doble efecto producido por el “3 a 1”: por un lado, los argentinos dejaron mayormente de viajar al exterior, vacacionando en nuestro país (sustitución de importaciones de servicios), y por otro lado se multiplicó la visita de extranjeros a nuestro país, especialmente de los países limítrofes, como Brasil y Chile en nuestro caso (exportación de servicios).
----------Remitiéndonos a Bariloche, obviamente en este contexto macro económico se incrementó el Turismo, y sus parámetros cuantitativos, la cantidad de visitantes y las noches cama. El origen más frecuente de los plus visitantes fue nacional, y de países limítrofes, Brasil en invierno y Chile en verano. Esto es así porque nuestras eventuales diferencias cambiarias no influyen mayormente en la decisión de viaje desde países de moneda fuerte del hemisferio norte, donde la mayor incidencia es la distancia.
Asimismo, se generó una fuerte corriente migratoria hacia nuestra ciudad, que en muchos casos fue acompañada de considerables inversiones en la construcción, especialmente de alojamientos turísticos y viviendas de clase media. Las opiniones más frecuentes indican que se pasó de una población de 90 mil habitantes a 140 mil, es decir 50% de crecimiento en apenas 5 años! Naturalmente que la falta de viviendas, en los sectores más humildes, es gravisima.
Ambos, turismo e inversión aportaron considerable liquidez, reflejada en las ventas de comercios y en las recaudaciones récord de tasas e impuestos. Pero si bien el turismo pudiera ser sustentable en el tiempo, al menos en teoría si se lo manejase correctamente, la inversión de por sí tiene un horizonte mucho más estrecho. Fue así que la construcción indiscriminada de nuevos alojamientos turísticos, condujo al absurdo de que, pese al notable incremento del Turismo, la ocupación promedio se mantuvo en el orden del 40%, si no algo menor. En los centros turísticos ORGANIZADOS del mundo, la oferta de alojamientos y en muchos casos la gastronómica, están reguladas en su cantidad, atendiendo a segmentos de tipificación y calidad. Esto es así porque han entendido que la sobre oferta es tan perniciosa para los usuarios turistas como lo sería una oferta mono u oligopólica, dado que se ingresa en una espiral descendente de calidad – precio- calidad- precio etc. y el demandante no encuentra lo que requiere.
He vivido reiteradas veces la repetición de ciclos económicos pendulares, y no hay motivo alguno para suponer que tarde ó temprano no se termine la situación cambiaria favorable, y me temo que, de seguir como hasta ahora, la situación de Bariloche se tornará entonces dramática:
· El exceso de habitantes en relación a los puestos de trabajo generará desocupación con índices intolerables. Recordemos que ya a fines de los noventa, con una población mucho más reducida, nuestra ciudad presentaba uno de los índices más altos de desocupación, solo por debajo del cinturón industrial de Rosario, Mar del Plata y algún otro. Esto fue así porque el Turismo es una actividad mano de obra intensiva, y a la vez que genera puestos de trabajo cuando crece, al entrar en crisis expulsa trabajadores en igual medida. Y si tenemos en cuenta una reciente información sobre la existencia en Bariloche de 6.000 planes sociales involucrando 30.000 personas, ahora, en pleno auge del Turismo, que puede esperarse si esta situación se deteriora!
· Deterioro cuando no quebranto de alojamientos turísticos, debido a la descomunal sobre oferta.
· Quebrantos comerciales, ya que también resultarán con oferta en exceso.
· Inviabilidad de Organismos públicos, totalmente sobre dimensionados.
Es entonces previsible, lamentablemente, que a tenor de una simple proyección de la situación actual la próxima IMPLOSIÓN cíclica de Bariloche sería catastrófica. A mi entender, además de la sobre oferta laboral, alojativa y comercial por falta de una adecuada regulación, el principal déficit que llevará a ahondar la crisis futura es el de obras de infraestructura turística, es decir no se previó en época de prosperidad como se afrontarían los tiempos más difíciles. No se han mejorado accesos ni rutas ni avenidas, no se ha mejorado la calidad y cantidad de excursiones, no se ha mejorado la terminal de ómnibus, y no solamente no se ha mejorado el paisaje sino que se lo ha deteriorado, por ejemplo con construcciones que obstruyen la vista del lago. Sin embargo, lo más emblemático de esta desinversión en infraestructura es la carencia aún hoy, Mayo de 2007, de un verdadero y adecuado Centro de Congresos y Convenciones!-----------
Pablo Guillermo Frisch
LE 4575281
No hay comentarios:
Publicar un comentario