martes, 29 de abril de 2008

Tenencia de la tierra INTA

Obtenido de INTA.


Río Negro

Tenencia de la tierra

Es conveniente que la obtención de la tenencia de la tierra forme parte de un programa integral de desarrollo, que tienda a evitar el negocio inmobiliario, desaliente el desarraigo y posibilite emprendimientos productivos de bajo nivel de riesgo; todo esto acompañado en forma intensiva de asistencia técnica, capacitación y una educación apta para la realidad donde estas sociedades están insertas.

Todo productor agropecuario en las regiones extensivas de la provincia aspira a tener seguridad jurídica sobre la tierra que ocupa. El requisito más oneroso para acceder a la titularidad de las tierras es la mensura.


Se mapea las áreas en las que la solución del problema de tenencia

La Dirección de Tierras vende las tierras fiscales a todo productor residente que, habiéndolas mensurado, acuerde un plan de pago con la provincia. Las ocupaciones que pasan al dominio privado por año son pocas.

La política provincial de entrega de tierras fiscales es de mantener este ritmo, ya que acelerarlo le crea resistencias, reclamos, juicios y denuncias públicas.

Es fundamental que se normalicen los aspectos relacionados con la tenencia de la tierra, regularizando jurídicamente la propiedad, teniendo en cuenta los preceptos de valor social y sustentabilidad de los recursos.

En cuanto a la dimensión de los predios, debe prever nuevas formas de utilización de las pequeñas unidades (asociativismo y otros), de manera que permitan la sustentabilidad económica del poblador y por ende, una mejor calidad de vida.

Cuáles serían las estrategias recomendables para la problemática de la tenencia de tierras?

  • Reducir el costo de la mensura: utilizar métodos expeditivos de ubicación catastral (GPS). Lograr que la Dirección de Tierras acepte el concepto de mensuras aproximativas en contraposición al nivel de detalle de la agrimensura tradicional.
  • Cumplir las exigencias de la original Ley 263, exigiendo un proyecto técnico económico financiable en el proceso de entrega de títulos, particularmente en las parcelas menores.
  • Establecer una escala diferencial en el valor del pastaje que, por ley debe cobrar la provincia por el uso de sus tierras. Aplicar un porcentaje de la recaudación al financiamiento del punto 2.
  • Implementar un proceso de herencia expeditiva no onerosa en las sucesiones indivisas de las tierras privadas de escasa superficie productiva. Aplicar un criterio similar en el traspaso de la ocupación precaria cuando se produce el fallecimiento del anterior usuario.
  • Recuperar y reconcursar la cesión de tierras fiscales abandonadas ó sometidas a desertificación ó inadecuado manejo productivo. Aplicar planes técnico-económicos con financiación viable para estas parcelas a reconvertir.
  • Recomendar al INAI un fuerte compromiso de apoyo y seguimiento con las reservas indígenas reconocidas en la provincia.
  • Estimular la explotación asociativa donde es posible un acuerdo entre usuarios de tierras fiscales ó parcelas menores con título de propiedad.

Organizarnos: Tierras Urbanas

Si nos organizamos y conocemos nuestros derechos, la tierra es nuestra...

Departamento de Pastoral Social de la Diócesis de San Carlos de Bariloche

Equipo Patagónico de Derechos Humanos

Pastoral de Tierras - Virgen Misionera

EL PROBLEMA ACTUAL DE LA VIVIENDA
El acceso a la tierra para nuestra vivienda es un Derecho Humano fundamental que hace a nuestra calidad de vida y a nuestra salud física y mental.

Por eso, tengamos en cuenta que el estado (municipio, provincia, nación) está obligado por las leyes y los tratados internacionales: a garantizar las condiciones para que todas las familias lleguemos a acceder a un techo seguro y digno con los servicios básicos (agua, electricidad, gas), a que tengamos la mayor seguridad posible en la tenencia (algún papel que nos avale) y a permitirnos disfrutar de una vida en comunidad. Para eso tiene que poner en juego hasta el máximo de los recursos de que disponga.

La necesidad de ocupar:

Al no encontrar otra solución, muchos tuvimos que ocupar algún terreno que encontramos libre para hacer nuestra casa y tener así un lugar propio.

Esto nos obliga a vivir en una situación precaria y a sentirnos bajo la amenaza permanente de desalojo por no saber quien puede ser el dueño, no pudiendo tampoco esmerarnos demasiado en hacer las mejoras necesarias para una vida digna ante el riesgo de tener que irnos de un día para otro.

Además de esto, tenemos que enfrentar la discriminación por parte de algunos vecinos y, para colmo, la persecución del sistema judicial.

La organización como forma de afrontar la situación:

Somos muchos los que estamos en esta situación, y para poder luchar por las cosas que todos necesitamos, tenemos mucho más fuerza y más ideas cuando nos juntamos y trabajamos entre todos. Tengamos en cuenta que cada uno por su cuenta casi nunca llega a ningún lado y es mucho más vulnerable.

En gran parte de las ocupaciones nos fuimos juntando para formar una organización de los que estamos en la misma situación, con lo que podemos trabajar más y mejor y ayudarnos unos a otros, gestionar las cosas en conjunto y ver cómo avanzamos, poniendo los criterios de justicia nosotros mismos para ver a quienes se ayuda primero y cómo conviene hacerlo.

La organización también nos ayuda para afrontar las situaciones injustas y para presentarnos ante los funcionarios del estado, teniendo en cuenta que éstos están obligados a escucharnos y a buscar soluciones en conjunto con nosotros.

A ellos podemos proponerles que dicten ordenanzas de excepción, que se dicten leyes de expropiación o de suspensión de desalojos, que sus técnicos presten colaboración en terreno sobre las necesidades que nosotros mismos les marcamos, etc.

¿Cómo nos organizamos?

Cuando las familias son pocas, lo más normal es que en los primeros tiempos nos juntemos todos en asamblea varias veces por semana, compartiendo las experiencias, votando entre todos los pasos a seguir y repartiéndonos las tareas según las posibilidades de cada uno.

En cambio, cuando son muchas las familias es difícil juntarlas a todas, y una de las maneras mas comunes que tenemos para organizarnos es formar una pequeña comisión de delegados elegidos por los vecinos de cada lugar, sea por manzana o por ocupación. Esos delegados tienen que ser los que más ganas tengan de trabajar para el grupo, con mayor vocación de servicio y que puedan llevar adelante la voluntad de los vecinos, con lo que además contagian de entusiasmo los demás.

Esa comisión es la que debe organizar las actividades para que participen la mayor cantidad posible de vecinos, reunirse periódicamente, buscar información, hacer gestiones ante el estado y las empresas de servicios, capacitarse para saber cómo actuar en cada caso y para informar a los vecinos, etc.

Si estamos bien organizados y bien informados va a ser muy difícil que nos pasen por encima. Si aprendemos lo suficiente nadie mejor que nosotros va a poner las ganas necesarias para luchar por lo que nos corresponde.

Nuestro propio censo:

Una de las primeras tareas que surgen siempre para la organización tiene que ver con hacer nosotros mismos el censo de la cantidad de familias, el lugar de cada una en cada manzana, cómo está integrado el grupo familiar y qué necesidades tiene cada casa, qué tipo de construcciones pudimos hacer, etc.

También podemos averiguar los datos más accesibles sobre quien figura como titular de los terrenos, qué deudas de impuestos tienen, si hay algún embargo, etc.

Sólo en la medida en que nuestra organización lo disponga y siempre y cuando resulte útil para mejorar nuestra calidad de vida, compartiremos estos datos con las direcciones del estado que correspondan.

La experiencia en la región andina:

En la zona urbana de Bariloche, más de 1600 familias han tenido que ocupar terrenos en estos últimos 6 meses, siendo más de 3000 las que viven en una situación de tenencia precaria.

La mejor opción que pudimos adoptar fue la de organizarnos internamente en cada una de nuestras ocupaciones y juntarnos con los representantes de las demás conformando la “Coordinadora Intertomas” y constituyendo un verdadero movimiento por el derecho a la tierra, empezando con más de 13 barrios distintos con problemas muy parecidos.

Gracias a esto, nos contenemos entre nosotros, diseñando en conjunto los pasos a seguir hacia adentro y afuera de la organización.

Nos presentamos juntos ante los funcionarios del gobierno y les planteamos nuestra situación y nuestras necesidades, logrando la sanción de ordenanzas tales como la creación del Consejo Social de Tierras y del Banco Municipal de Tierras, proponiendo ideas al estado para armar nuestros barrios, encaminar nuestra situación legal y lograr de a poco la conexión a los servicios básicos para todos.

Gracias a la organización encontramos lugares donde reunirnos para compartir nuestros problemas, pensando y gestionando las soluciones en conjunto, defendiéndonos de las injusticias y proyectando entre todos cómo tiene que ser el lugar que queremos.

También logramos el apoyo de organizaciones y profesionales que nos asesoran y acompañan en nuestro proceso, así como de técnicos del estado nacional a través de la Subsecretaría de Tierra y Hábitat Social.

Experiencias parecidas se vienen dando en El Bolsón y otras ciudades de la región, donde distintos grupos de familias se han organizado al ocupar la tierra en que viven y resuelven sus problemas en la asamblea donde se juntan todas las semanas.

¿Qué pasa cuando la tierra es del estado?

Cuando el terreno es propiedad del estado (municipio, provincia o nación) tengamos en cuenta que el gobierno no puede promover nuestro desalojo judicial porque los tratados de derechos humanos se lo prohíben, siendo su responsabilidad el encontrar las formas de regularizar nuestra situación.

Para eso tiene que relevar las ocupaciones, analizar la situación social de la gente y sus demandas, ver qué se necesita con más urgencia y diseñar, en combinación con la organización que conformemos, cual es la mejor manera de transferirnos esas tierras.

También puede declarar la emergencia habitacional o dictar ordenanzas especiales para nuestra radicación definitiva. Una posibilidad es que haga boletos de compraventa individuales o que ceda la tierra a nuestra organización, sea a través de la forma de una cooperativa, de una asociación intermedia o de otra forma jurídica que resulte útil y conveniente.

¿Qué pasa si aparece el dueño?:

Es bueno saber que por más precaria que parezca nuestra situación, nadie tiene derecho de desalojarnos violentamente ni de amenazarnos por estar en nuestra casa.

En todo caso, si el terreno es privado y aparece el dueño, éste intentará acercarse para hacernos saber esa situación, para lo cual es importante también contar con el apoyo de la organización para que no esté solo el vecino que reciba la inesperada visita.

Siempre en buenos términos, es conveniente saber primero si los papeles que dice tener son los que corresponden (boleto de compraventa o escritura), para esto es importante que los delegados se capaciten y, si es necesario, consulten con algún abogado amigo.

Sólo si la persona demuestra ser el dueño, es importante que entre todos los presentes le puedan explicar la situación, siempre pacíficamente, para ver cuales son las posibilidades de llegar a algún tipo de acuerdo que le sirva a ambas partes.

Distintas posibilidades:

Por ejemplo, una solución posible es que se le pueda ofrecer un pago en cuotas accesibles para esa familia, teniendo en cuenta las mejoras que ya se hicieron (limpieza de terreno, alambrado, platea, etc) y descontándole las deudas que tenga el terreno (impuestos, servicios, etc.).

Para eso, nuestra misma organización puede llegar a contar con fondos recaudados por actividades comunitarias para ayudar a salir del paso a esa familia, prestándole parte de lo que necesita o ayudándola a que los consiga.

Otra posible solución es que se pueda ofrecer a ese dueño otro lugar alternativo del barrio para instalarse en donde aún queden terrenos sin ocupar. Por supuesto dependerá de su voluntad, pero ante situaciones así muchos son los que han aceptado, frente a la posibilidad de quedarse sin nada.

Sólo en última instancia, y si resulta imposible cualquier tipo de acuerdo, siempre y cuando ese dueño precise de ese terreno para instalar su propia vivienda y tengamos pocas cosas hechas en el mismo (por ej: limpieza o alambrado, o una casilla trasladable), podemos considerar la posibilidad de un traslado a otro lugar que nos pueda habilitar nuestra propia organización.

¿Qué juicios nos pueden iniciar?

Recién después de todo eso, no llegando a ningún acuerdo y si aún así decidimos no movernos, el dueño podrá iniciarnos un juicio de desalojo, del que se nos tiene que notificar con un oficial de justicia. En la cédula (notificación) tiene que venir una demanda por escrito en la que figurará un plazo para contestar y poner nuestros argumentos, para lo cual tenemos que nombrar inmediatamente un abogado que nos defienda.

También es posible que el dueño nos denuncie ante la justicia penal por usurpación, para lo cual también tendremos derecho de defendernos con un abogado cuando nos cite el Juez a declaración indagatoria.

Tengamos en cuenta que nunca hay que declarar ante la policía aunque ésta lo pida. Si nos citan de la comisaría o el destacamento, será solo para notificarnos que existe una causa judicial o para avisarnos que el juez nos citó a declarar, pero nunca tenemos que declarar en la comisaría.

Para esto, siempre el paso previo es que venga una comisión policial a hacer una “constatación” en el lugar, para lo cual hacen un pequeño informe de las obras que ven construidas y piden datos de los que vivimos en la casa. En ese caso, dar sólo la información de que se pertenece a la organización del barrio y que se dirijan al delegado, que estará capacitado para estos casos.

Como vemos, si todos tenemos esta información y nos encontramos bien organizados, nadie puede venir por su cuenta a sacarnos violentamente del lugar donde tenemos nuestra casa y vivimos con nuestra familia, teniendo que seguirse siempre estos pasos legales.

La posibilidad de la expropiación:

Cuando un mismo privado es dueño de muchos de nuestros lotes, siempre existe la posibilidad de que nuestra organización gestione ante el estado (municipal y provincial) para que se declare la utilidad pública de esa tierra (por ordenanza municipal) y se disponga la expropiación a favor del estado (por ley provincial).

Es una posibilidad válida y legal para solucionar problemas complejos, teniendo el estado que indemnizar al dueño y ver las distintas maneras en que podrá regularizar luego nuestra situación, sea a través de ordenanzas de excepción, boletos, cooperativas, etc.

Cosas para recordar siempre:

1.- Nadie nos puede desalojar sin una orden escrita firmada por un Juez.-

2.- Tampoco corresponde que ese juez dicte ninguna sentencia de desalojo cuando no hubo un juicio previo en el que tuviéramos derecho a defendernos.-

3.- Sólo si un juez ordena la “restitución inmediata” (luego de una denuncia por usurpación), hay que convocar de urgencia a la organización. Para esto la policía siempre tiene que intimarnos antes y darnos un plazo, mostrándonos la orden del juez.-

4.- No debemos dejarnos asustar por las amenazas de nadie.-

5.- Nunca tenemos que entregar cosas o documentación original a gente que dice que viene a cobrarnos, cuando estamos pagando en cuotas y se nos atrasan los pagos.-

6.- Cuando pagamos alguna cuota por el terreno tenemos que exigir siempre que nos firmen el correspondiente recibo en el momento.-

7.- Nunca corresponderá que nos desalojen si estamos comprando el terreno en cuotas y ya pagamos más del 25 % de su valor, o hicimos construcciones por más del 50 %.-

8.- Siempre tenemos derecho de solicitar los servicios esenciales ante las autoridades que correspondan, tengamos o no boleto de compraventa.-


¿Qué hacemos cuando nos intimiden injustamente?

Ante cualquier situación injusta, siempre busquemos el apoyo de nuestra organización para asesorarnos, defendernos y buscar soluciones en conjunto.

Si bien no debemos responder con violencia, no podemos encontrarnos solos frente a quienes pretenden violar nuestros derechos.


Por todo lo que viene...

Sepamos siempre que:

La tierra nos dignifica y hace libres.-

No somos delincuentes ni ciudadanos de segunda.-

Tenemos derecho a nuestro lugar propio y a vivir dignamente, porque es un derecho humano fundamental y lo dicen las leyes, las Constituciones y los Tratados internacionales.

La lucha por nuestra tierra es por nosotros y nuestros hijos.-

No queremos que nos regalen nada.-

Simplemente queremos justicia.-

Sin la tierra estamos en el aire...

Algunos teléfonos útiles:

Equipo Patagónico de Derechos Humanos:

524555 – 520973 - 1541-1714.

Equipo Pastoral de Tierras:

525508 - 461375

Tierra Rionegrina 07-2005

Reflexiones sobre nuestra tierra rionegrina

MENSAJE DEL DEPARTAMENTO DE PASTORAL SOCIAL DE LA DIÓCESIS DE SAN CARLOS DE BARILOCHE – JULIO 2005

“‘Del Señor es la tierra y cuanto hay en ella, el orbe y los que en él habitan’ (Sal 24,1), es la afirmación de fe que recorre toda la Biblia y confirma la creencia de nuestros pueblos de que la tierra es el primer signo de la Alianza de Dios con el hombre.” Sto. Domingo 171.

El hecho de que cerca de la tercera parte de los pequeños y medianos productores de la región patagónica se hayan visto obligados a abandonar su porción de tierra durante los últimos 15 años debe constituir una alarma y un llamado a todos los hombres, especialmente a quienes habitamos este suelo rionegrino.

El sistema de uso y reparto de la tierra que rige en la Patagonia tiene sus cimientos en la explotación del hombre por el hombre, en la producción irracional de la riqueza sin medir las consecuencias de ninguna índole, en una concepción de la propiedad privada que inhabilita a la tierra para cumplir con la función social que debería tener para el desarrollo de la humanidad y en una utilización de los recursos naturales incompatible con la sustentabilidad y con los derechos humanos.

LA SITUACIÓN

Como cristianos, hijos de un mismo Padre, estamos preocupados por la situación que hoy viven muchos de nuestros hermanos, a partir de una concepción errónea sobre la tenencia y el uso de la tierra. Podemos comenzar esta reflexión resumiendo esta dura realidad en cinco grandes problemas:

1. La concentración de enormes extensiones de tierra en pocas manos, dando lugar a un mercado inmobiliario inescrupuloso que establece la regularización de los títulos en manos de quienes no trabajan la tierra, lo que nos permite hablar de una "producción agropecuaria sin productores".

2. La extracción de los recursos naturales, tales como el agua, los hidrocarburos o los minerales, a través de métodos degradantes y lesivos del medio ambiente.

3. La situación de los ocupantes de hecho a gran escala, muchos de ellos productores desplazados de sus tierras de origen, quienes se ven a su vez obligados a ocupar un terreno en áreas marginales de los núcleos urbanos a raíz de injustas ejecuciones hipotecarias de sus predios, o simplemente por falta de oportunidades en su lugar de origen, lo que se traduce en la pérdida de sus tierras y en datos alarmantes de una nueva marginalidad en las ciudades.

4. La migración de los jóvenes, que reviste un carácter de verdadero éxodo, y que tiene raíces profundas en la desvalorización de la tierra como fuente de vida y en las duras condiciones de subsistencia en el campo. De continuar esta tendencia se complica seriamente la posibilidad de la ocupación y de la producción de cara al futuro.

5. La mirada indiferente de la clase política. Si bien es posible y gratificante encontrar excepciones, constatamos que en líneas generales el Estado y los partidos renuncian sistemáticamente a decidir y planificar sobre el uso y tenencia de este recurso estratégico en función de un proyecto de país a largo plazo en el que se hallen garantizados la soberanía y resguardados los intereses de sus habitantes.

“Por parte vuestra, responsables de los pueblos, clases poderosas que tenéis a veces improductivas las tierras que esconden el pan que a tantas familias falta: la conciencia humana, la conciencia de los pueblos, el grito del desvalido y, sobre todo, la voz de Dios, la voz de la Iglesia os repite conmigo: no es justo, no es humano, no es cristiano continuar con ciertas situaciones claramente injustas. Hay que poner en práctica medidas reales, eficaces, a nivel local, nacional e internacional, en la amplia línea marcada por la Encíclica “Mater et Magistra”... Amadísimos hermanos e hijos: trabajad en vuestra elevación humana” Palabras de Juan Pablo II, en Oaxaca, México (9. AAS LXXI, p. 210).

La concentración de la tierra en pocas manos

Observamos con preocupación la concentración de las tierras en muy pocas manos, principalmente de grupos y sociedades extranjeros, que proponen un modo de explotación altamente extractivo de sus recursos naturales a corto plazo, con escasos o nulos beneficios para la población o los estados.

Así como a nivel nacional, 103.000 de los otrora 400.000 pequeños y medianos productores debieron dejar su tierra desde 1988 a 2002, en Patagonia ha venido sucediendo lo mismo en iguales porcentajes por razones diversas, entre las que se cuentan la rebaja inédita en el precio de la lana durante esos años; la ejecución de las hipotecas y de los créditos obtenidos para producciones que resultaron ruinosas en virtud de las políticas públicas propuestas durante el período (14.000.000 de has. afectadas en todo el país); escasas o nulas posibilidades de desarrollo en sus lugares por sufrir condiciones extremas y por falta de apoyo y promoción desde los gobiernos para afrontar las mismas; levantamiento de medios de transporte y comunicación; desertificación creciente basada en la monoproducción; avance de las mineras o de las empresas extractoras de hidrocarburos destruyendo cualquier otra opción de vida a su paso, etc.

Hoy tenemos una situación concreta: "Tierra sin gente, gente sin tierra, el mundo al revés".

Cuando nuestros obispos latinoamericanos, reunidos en Puebla, México, en 1979, señalaron las causas de las injusticias que vivía el hombre de la región, incluyeron a “la falta de reformas estructurales de la agricultura, adecuadas a cada realidad, que ataquen con decisión los graves problemas sociales y económicos del campesinado: el acceso a la tierra y a los medios que hagan posible un mejoramientos de la productividad y la comercialización”. Puebla, nro. 68.

La extranjerización

4.000.000 de hectáreas han sido vendidas recientemente en Patagonia a muy pocas manos, principalmente extranjeras, sea para realizar explotaciones agrícolas, mineras o hidrocarburíferas, o simplemente para su ocio, "alejados del mundanal ruido". Hoy se encuentran a la venta "al mejor postor" 3.800.000 hectáreas más, sumando así 7.800.000 hectáreas que se estarían perdiendo para la utilización de ese recurso como herramienta de cambio para la injusticia imperante. Lo propio sucede a nivel nacional, donde 16.900.000 ya han sido vendidas y otras 13.000.000 están a la venta, sumando así la friolera de casi 30.000.000 de hectáreas sobre las que la gente podría haber propuesto proyectos productivos o alternativas de vida que hoy ya se encuentran indisponibles.

Paradójicamente, y a pesar de la dimensión económica que representan estos grandes "inversores", muchas de sus estancias deben grandes sumas a los estados provinciales en carácter de impuesto inmobiliario, argumento en virtud del cual los propios funcionarios desplazaban a los pequeños productores y ocupantes indígenas de las tierras fiscales y que teóricamente se solucionaba a partir de la "privatización" de esas mismas tierras en manos de esos pocos inversores "solventes".

Las poblaciones afectadas pierden definitivamente su libre entrada a lo que siempre accedieron (bosques, costas, etc.), provocando grandes e indeseables cambios ambientales y afectando gravemente los derechos humanos en el caso de las empresas mineras e hidrocarburíferas.

“En América Latina y el Caribe las grandes ciudades están enfermas en sus zonas centrales deterioradas y sobre todo en sus villas de miseria. En el campo, las poblaciones indígenas y campesinas son despojadas de sus tierras o arrinconadas en las menos productivas y se siguen talando y quemando los bosques en la Amazonia y en otras partes del Continente. Ante esta crisis, se viene proponiendo como salida el desarrollo sostenible que pretende responder a las necesidades y aspiraciones del presente, sin comprometer las posibilidades de atenderlas en el futuro. Se quiere así conjugar el crecimiento económico con los límites ecológicos.” Santo Domingo, nro. 169.

La tierra, el agua y la moda

Resulta aún poco difundido en nuestra cultura, pero despierta un notable interés para quienes planean estratégicamente el futuro mundial el hecho de que también la Patagonia es una fuente muy importante de agua potable (la segunda fuente del mundo en cantidad por habitante), garantizada a través de infinitos ríos, arroyos, vertientes y hasta grandes extensiones de hielos continentales. Los espacios del planeta que tienen disponibilidad de agua dulce y densidad poblacional baja se han convertido en el botín de los poderosos del mundo, que se los disputan para garantizarse su bienestar y calidad de vida.

Además, esta región, con su propia identidad, ha llegado a transformarse en una suerte de "moda" para los países centrales; éstos consideran que Amazonia, Australia, Patagonia o Antártida, territorios aún vírgenes para un mundo industrializado, agonizante por la guerra, la polución y la aglomeración de personas, constituyen hoy un verdadero "salvoconducto" para quienes cuenten con cierto nivel de medios a fin de escapar de cualquier crisis regional o conflicto armado.

Existen importantes extensiones de tierras perfectamente cultivables a través de métodos modernos, no disponibles para los pequeños productores y comunidades indígenas. Además de contar con todas las fuentes de energía (petróleo, gas, energía hidroeléctrica, eólica y solar) existen infinitos bosques naturales y grandes extensiones de Parques Nacionales, ideales para el mentado canje "verde por verde", así como gran riqueza minera y fauna marítima capaz de alimentar a varios países.

LA TIERRA, DON DE DIOS PARA TODOS

Cuando hablamos del término "tierra" debemos comprender que estamos tratando del recurso estratégico por excelencia de toda comunidad, del primer y principal elemento de producción en la historia de la humanidad y desde el cual se derivaron siempre todos los demás recursos que dieron pie al desarrollo de los pueblos.

La tierra, unidad de lo diverso y organismo vivo del cual sin duda formamos parte como especie humana, se encuentra sometida a procesos indeseables que redundan en daños irreparables y comprometen el futuro de las generaciones venideras, tales como el calentamiento global, la degradación del suelo y del medio ambiente, la extracción de sus recursos no renovables con métodos que la destruyen, el agotamiento y contaminación de sus aguas, las migraciones forzadas de pueblos enteros a raíz de hechos generados por el hombre.

Debemos partir también de la base de que la tierra no ha sido producida por nadie en particular, habiéndonos sido dada por Dios. Por tanto, ningún ser humano podrá arrogarse el derecho de hacer con ella cualquier cosa que le plazca por el solo hecho de figurar como "propietario" de la misma, dado que involucra con su accionar al recurso de las generaciones venideras. La tierra, además, es un bien no reproducible, lo que significa que así como nadie la produjo, nadie tampoco podrá crear otra igual. Debemos adicionar el hecho de que estamos hablando de un bien limitado, dado que no existen otras tierras disponibles que las ya existentes.

“La convicción de que ‘Dios ha destinado la tierra y cuanto ella contiene para uso de todo el género humano’ (Gaudium et spes, 69) ha de inspirar un sistema de gestión de los recursos más justo y mejor coordinado a nivel mundial. La Iglesia hace suya la preocupación por el medio ambiente e insta a los gobiernos para que protejan este patrimonio según los criterios del bien común.” Santo Domingo, nro. 23.

A pesar de lo expuesto, tanto en Argentina como en los países vecinos, la apropiación de las mejores tierras no se ha operado en favor de los campesinos minifundistas, ni de los indígenas o de los que no tienen hogar sino que, muy por el contrario, ha recaído en muy pocas manos de una determinada clase social, devenida en "terrateniente" en función de haber aprovechado procesos violentos de despojo de pueblos originarios o políticas oficiales generadas por funcionarios cómplices.

La concentración de los bienes materiales en el mundo, dentro de los cuales se halla la tierra, es expresión de la concentración del poder en unos pocos grupos que no dudan, a la hora de defender y acrecentar sus intereses, en hacer sufrir penurias impensables al resto de la humanidad, aún cuando el desarrollo de la ciencia y la investigaciones aplicadas al proceso productivo hayan logrado niveles de producción sin precedentes. La injusticia e inequidad de esta situación es propia y fundamento del sistema vigente.

El territorio y la identidad

Resulta prácticamente innecesario describir el carácter esencial que para los pueblos indígenas guarda su relación con la "tierra" que poseen ancestralmente. Baste para ello consignar el significado del propio nombre con que se identifica a uno de los Pueblos Originarios de la Patagonia: "Mapuche = Gente de la tierra"

Sin embargo, es necesario aclarar que para los integrantes de los pueblos originarios el vocablo "tierra" se enmarca en el concepto de "territorio", puesto que el mismo corresponde al espacio necesario y esencial para el desarrollo y transmisión de su cultura ancestral.

En la cosmovisión de estos pueblos, el desarrollo o evolución de las personas no se halla directamente relacionado con el "progreso material"; muy por el contrario, el mayor hincapié se encuentra dado en la ESPIRITUALIDAD y en su estilo de vida COMUNITARIO.

”Si la Iglesia en América, fiel al Evangelio de Cristo, desea recorre el camino de la solidaridad, debe dedicar una especial atención a aquellas etnias que todavía hoy son objeto de discriminaciones injustas. En efecto, hay que erradicar todo intento de marginación contra las poblaciones indígenas. Ello implica, en primer lugar, que se deben respetar sus tierras y los pactos contraídos con ellos; igualmente, hay que atender a sus legítimas necesidades sociales, sanitarias y culturales. Habrá que recordar la necesidad de reconciliación entre los pueblos indígenas y las sociedades en las que viven.” La Iglesia en América, nro.64.

El proceso histórico que determinó el despojo violento de estos pueblos de su tierra y de buena parte de su patrimonio cultural, es el mismo que hoy concreta el despojo también violento de grandes masas poblacionales sin importar su condición racial.

Está claro entonces, que superar la discriminación y marginalidad de que son objeto los pobladores y comunidades indígenas supone superar al mismo tiempo la discriminación y la marginalidad de la población en su conjunto, y esto sólo es posible desde la aceptación y profundo respeto por la interculturalidad fuertemente vigente en Patagonia.

“Dios ha dado la tierra a todo el género humano para que ella sustente a todos sus habitantes, sin excluir a nadie ni privilegiar a ninguno. He ahí, pues, la raíz primera del destino universal de los bienes de la tierra. Esta, por su misma fecundidad y capacidad de satisfacer las necesidades del hombre, es el primer don de Dios para el sustento de la vida humana. Ahora bien, la tierra no da sus frutos sin una peculiar respuesta del hombre al don de Dios, es decir, sin el trabajo. Es mediante el trabajo como el hombre, usando su inteligencia y su libertad, logra dominarla y hacer de ella su digna morada. De este modo, se apropia una parte de la tierra, la que se ha conquistado con su trabajo: he ahí el origen de la propiedad individual. Obviamente le incumbe también la responsabilidad de no impedir que otros hombres obtengan su parte del don de Dios, es más, debe cooperar con ellos para dominar juntos toda la tierra.” Centessimus Annus, nro. 31.

Tierras fiscales, principal patrimonio

Si bien en la región pampeana la "regularización" de las tierras en manos de los poderosos quedó consolidada desde hace ya más de un siglo, en Patagonia, en cambio, el Estado no ha podido concluir con dicho proceso, quedando importantes áreas de tierras fiscales en las provincias norpatagónicas y en la isla de Tierra del Fuego, razón por la cual los Estados provinciales se ven aún obligados a tomar determinaciones centrales respecto de los criterios de utilización de dichas tierras.

Solamente la provincia de Río Negro cuenta con cuatro millones ochocientas mil hectáreas de las tierras denominadas "fiscales" conformando el 25 % de la superficie provincial. (lo que la constituye en el principal terrateniente de la Patagonia) En el caso de Chubut hablamos de 3.048.000 has, es decir el 12 por ciento del total de la provincia. Todas ellas se encuentran ocupadas, de una forma o de otra, por pobladores individuales y sus familias, en muchos casos pequeños productores de origen mapuche que, en el mejor de los casos, sólo cuentan con el denominado "permiso precario de ocupación".

Existe un marco legal que en líneas generales consagra progresistas conceptos, tales como "La tierra es un instrumento de producción, considerada en función social", mencionando luego como fin que "la tierra sea de propiedad del hombre que la trabaja, siendo asimismo base de su estabilidad económica, fundamento de su progresivo bienestar y garantía de su libertad y dignidad".(art. 2, ley 279 de Río Negro).

Sin embargo, se viene ejerciendo presión de hecho a través de los intereses que operan muchas veces contando con la ineficiencia e incluso la complicidad del estado, y de derecho, intentando modificar estas normas. Desde una concepción de rentabilidad y eficiencia se pretende la no viabilidad de la enorme mayoría de los productores, que no estarían en condiciones de competir por escala y tecnología en las condiciones que hoy define el mercado. Se van así creando condiciones para el despojo de miles de pequeños minifundistas y pequeños productores de la Patagonia.

Las tierras fiscales en la "mira"

Algunos antecedentes, como la ley provincial 3210 de Río Negro, también llamada de "FONDO FIDUCIARIO" ha sido dictada en octubre de 1998 con el objeto de determinar la transferencia de las tierras fiscales de la provincia a "Río Negro Fiduciaria S.A." para la "realización o concreción de otras operaciones cuya renta o producido se afectará a la atención del pago de las deudas del Estado provincial y a la afectación como contrapartida provincial de los créditos con la Banca Multilateral".

Si bien este peligroso criterio legal se halla suspendido de hecho ante el reclamo de los productores y sus organizaciones, que dio pie al dictado de otra norma que, hoy por hoy, excluye de Río Negro Fiduciaria S.A. a las tierras fiscales, resulta aún así un peligroso antecedente y un motivo de preocupación para los distintos productores y ocupantes de las tierras fiscales provinciales, que ante cualquier vaivén legislativo podrán ver de un momento a otro a sus tierras integrando nuevamente este fondo "de garantía" para la deuda pública interna y externa del Estado Provincial.

No olvidemos que hoy esa provincia posee un importante pasivo y un escaso patrimonio estatal luego de las privatizaciones de los años 90, lo que puede llevar a la tentación de utilizar la tierra fiscal como principal garantía de esa deuda pública. Llegando a Chubut, se tomó conocimiento de una encuesta organizada en años recientes consultaba lo que opinaba la población respecto de canjear la deuda pública del estado por tierras fiscales.

Notable estado público tomó también la iniciativa propuesta desde la Secretaría de Medio Ambiente a nivel nacional, por entonces a cargo de la Ing. Alzogaray, de canjear "verde por verde", haciendo con ello alusión a la posibilidad de eliminar, o reducir sensiblemente la deuda externa nacional, entregando los Parques Nacionales a las naciones acreedoras de la Argentina para que sean ellas quienes los administren.

Más allá de la viabilidad concreta de estos dichos y hechos, lo cierto es que son antecedentes que hablan de intenciones que han estado presentes en actores políticos, y que tienen un contexto concreto a partir del interés que despierta Patagonia en el mundo.

EL COMPROMISO

Ante la injusticia estructural que se viene observando en torno a la tenencia y al modo de aprovechamiento de la tierra en la Patagonia, se han venido reuniendo en foros permanentes las cooperativas, pequeños productores, comunidades originarias, vecinos autoconvocados contra la minería, grupos ecologistas, equipos de pastoral social de diversas diócesis, tanto como grupos de técnicos y especialistas comprometidos con el desarrollo de sus regiones.

La misión histórica de esta generación es poner las cosas en su lugar, vinculando de manera creativa la gente con la tierra, de cara a una responsabilidad y un compromiso con el presente y el futuro.

Porque esta situación implica, no solo una pérdida de un recurso estratégico para la población, sino también un menoscabo en la soberanía de los estados en relación con las políticas públicas que podrían haberse implementado respecto de las mismas a favor del bienestar de todos los administrados y no de unos pocos. Esa misma pérdida de poder de decisión sobre la tierra se hace extensiva a los recursos naturales esenciales, como el agua, los minerales o la energía, racionalmente aprovechados.

Aunque la Patagonia posea una gran extensión, con enormes recursos y poca población, es obvio que la misma podrá albergar más población y obtener el bienestar para todos sus habitantes en la medida en que logremos garantizar un uso sustentable de sus recursos centrales: la gente y la tierra.

Las condiciones necesarias para que esto ocurra deberán ser generadas entre todos, por lo que será útil discutirlas desde las diferentes miradas (sectoriales, ideológicas, religiosas, culturales) buscando una síntesis que nos abarque en la diversidad, y que tenga en esta diversidad su principal sustento.

Siendo la tierra el bien estratégico por excelencia, en tanto medio de producción y recurso para el desarrollo de la vida y la promoción humana, la misma constituye un factor fundamental, no sólo para la subsistencia sino también para acceder a un desarrollo sustentable y con equidad, el que deberá considerarse como una verdadera alternativa al modelo económico imperante ante la crisis estructural de nuestro país.


Declaración de la Reforma Urbana 10-2006 Experiencia

Campaña Internacional 02 de octubre de 2006 “Día Mundial del Hábitat”

LEY MARCO – REFORMA URBANA – DERECHO A LA CIUDAD – CIUDADES IMANES DE ESPERANZA

Jornada: "Hábitat Social en Argentina"
Solución Integral al Problema Habitacional
Ciudad Universitaria -Aula Magna -Facultad de Arquitectura Pabellón III 3° Piso

Ponencia: Declaración de la Reforma Urbana
Dr. Sebastián Tedeschi – COHRE -Centro por el Derecho a la Vivienda y contra Desalojos –

Buenas tardes, a todas y todos.
Primero quería agradecer a los organizadores la invitación.
Yo trabajo en una organización que se llama COHRE, Centro por el derecho a la vivienda contra desalojos, es una ONG internacional. Trabajamos para promover el derecho a la vivienda en todo el mundo, y también luchamos contra las políticas y las leyes que permiten los desalojos forzosos, pero además nuestro trabajo en Argentina estamos participando de una red que se llama Movimiento por la Reforma Urbana. El año pasado en el día del hábitat lanzamos una declaración, que es una plataforma de discusión, de trabajo, con la idea de promover una agenda política en el país que permita transformar las políticas públicas en una política que se base en derechos humanos, fundamentalmente. Yo quería en el día de hoy presentar esta declaración.
Nosotros partimos de un diagnostico general de la situación de las políticas de vivienda en Argentina y estamos proponiendo unos 12 puntos de discusión. Los movimientos populares, las ONG, las organizaciones, los técnicos, todas las personas que trabajan desde las políticas de vivienda, pero que están en los conflictos del hábitat en los espacios urbanos se puedan articular en pos de forzar una agenda pública que nos permita democratizar las políticas urbanas en Argentina.
Antes quería decir algunas cosas, el tema urbano que es el que nos convoca a nuestro movimiento no es ajeno a las otras conflictividades territoriales que hay en el país, nosotros estamos viendo como crecientemente, tanto en el espacio rural, conflictos de movimientos campesinos. Ustedes han visto los conflictos que hay tanto en el norte de Córdoba, en Santiago del Estero, en Chaco, desplazamiento de campesinos, grupos armados privados al servicio de terratenientes que expulsan a los campesinos. Este es un país donde nunca hubo una reforma agraria, es decir una re distribución de la riqueza, tiene algo que ver en la confrontación urbana, con la conflictividad que se ve en los territorios de los pueblos indígenas.
Ustedes saben que a pesar de que en Argentina desde el ‘94 se reconocen los derechos territoriales, a pesar de que esta el convenio 169 los procesos de titulación de tierras están bastante atrasados, y sobre todo hay muchas provincias que siguen impulsando titulación individual de terrenos para dejar en una situación vulnerable a pueblos indígenas, sobre todo donde hay proyectos de explotación minera, minas de oro, distintos tipos de proyectos de inversiones, que en general los gobernadores de las provincias son los principales defensores y en general, retrasan estos procesos de titulación para no permitir una gestión democrática de los territorios.
Entonces decimos que los conflictos que hay en Argentina, tanto rural como urbano, y el problema de la democratización del acceso a la tierra, es un problema que compartimos tanto en el espacio urbano como en el rural. Con distintas significaciones, con distintos sectores especulativos, por ejemplo a veces vamos a ver en algunos lugares emprendimientos turísticos, yo no llegue a escucharlo a Darío Duch (de Bariloche) a la mañana, pero hace unos meses cuando conversábamos, me contaba de estos procesos en Bariloche de toma de tierras por gente de clase media. Que pasa, los precios del mercado son inaccesibles, hay una creciente exclusión en el acceso a la tierra, ya no solo de los pobres, sino también de muchos sectores medios. Y, por otro lado hay una expansión de las posibilidades de negocio que arrasan con las posibilidades de que las personas tengan un lugar donde vivir. De alguna forma lo que trabajamos acá, desde la reforma urbana, el derecho a la vivienda se trata en realidad, del derecho de las personas de un lugar donde vivir, y eso en la Argentina no esta garantizado, ni mucho menos.
Dentro del diagnostico que nosotros hacíamos en el espacio urbano, veíamos que en Argentina a pesar que desde hace 50 años el derecho a la vivienda esta protegido en la constitución nacional, aun no se cuenta con una marco jurídico ni con políticas que garanticen la protección del derecho a la vivienda a nivel nacional y provincial. En general lo que hay son leyes de distribución del presupuesto, de asignación de recursos, pero no hay leyes que se fundamenten en derechos, y ustedes saben que hay una gran división entre los derechos y cuando una política publica esta basada en derechos y cuando es discrecional. En general nuestras políticas de vivienda son discrecionales, no se basa el orden jurídico en el reconocimiento de que las personas pueden exigir esos derechos, sino se basan el discreción del Estado que si quiere construye, si no quiere no construye, si quiere otorga, si no quiere no otorga, es decir, no se dan fundados en derechos.
Y un punto fundamental para nosotros, es que estas políticas de vivienda se funden en derechos humanos, en el derecho a la vivienda.
El segundo punto de este diagnostico, es que, a pesar de que Argentina en el año 94 incorporó la convención interamericana de derechos humanos, conocida como el pacto de San José de Costa Rica, en el articulo 21 se protege a la propiedad en su función social, a pesar de que muchas personas aun sin contemplar todo el régimen jurídico argentino afirman de que en Argentina rige el principio de la propiedad privada absoluta e individual, esto es mentira por que hay un marco jurídico constitucional que ha recogido la función social, inclusive, hoy creo que Raúl Wagner lo presentaba a la mañana, desde 1921 en Argentina hubo mas de 15 leyes que establecieron múltiples limitaciones, para el control del mercado de alquileres. Hubo varias iniciativas y la Corte Suprema de justicia aun con elites conservadoras que participaban en su integración, reconocieron múltiples veces que el derecho a la propiedad privada podía ser limitado por la función social que esta cumple.
Luego el tercer punto, es que veíamos cada vez más difícil el acceso al suelo urbano y a la vivienda adecuada, veíamos que faltan políticas que intervengan en el mercado para frenar la especulación y favorezcan la recuperación de tierras vacantes con finalidad social. Veíamos también en el bloque anterior, como decían el déficit habitacional es, anual se incorporan 120.000 viviendas y ustedes vieron que todo el plan federal el máximo que va a construir en total van a ser 273.000 y mejoramiento 270.000. y aunque es una gran inversión publica, ven que por mas dinero que se ponga la solución del problema de la vivienda no solo pasa por la construcción, sino también de facilitar el acceso a la vivienda que ya existe.
En un informe que mi organización hizo en el 2004 sobre Argentina, por ejemplo equiparábamos la cantidad de viviendas vacías que hay en Argentina con el déficit habitacional. Y mientras había 100.000 viviendas vacías, el déficit de la ciudad era de 120.000, es decir que no se trataba de construir 120.000 viviendas nuevas, sino de ver como la vivienda que ya existe puede ser accesible a esas personas.
La cuarta cuestión, ya hablaron bastante, tanto Néstor Jeifetz como Raúl mas temprano, la ciudades en Argentina son un espacio de marginalización y segregación de los pobres. Vimos la experiencia de Córdoba, de expulsión directa, violenta, al estilo dictadura militar, de los pobres del centro de la ciudad. Pero hay otras formas mas moderadas de conseguir los pobres un lugar en el centro de la ciudad y, si ven la cantidad de desalojos son bastantes. Y vamos a ver que la legislación que existe en Argentina es totalmente contraria a las declaraciones de derechos humanos.
Hay normas especificas de Naciones Unidas que establecen cuales son los criterios en los que un desalojo podría ser legal, que derechos debería respetar de las personas. Ninguno de estos estándares jurídicos se cumplen, incluso en Argentina, se han modificado las leyes de procedimiento civil, para garantizar un “Desalojo Express” digamos que la persona tenga derecho a defensa antes de tener una sentencia para poder ser desalojada. Y en el código penal hay dos delitos bien interesantes, uno es el de la usurpación y el otro el de la violación de domicilio. Mientras en Argentina hay, en cifras de la Subsecretaria de Tierras para el Hábitat Social, hay 5 millones de viviendas que no están regularizadas, esas personas no pueden ser protegidas frente al delito de violación de domicilio, ya que no tienen títulos formales. Y muchas veces hay desalojos ilegales, sin orden judicial, patrones, o policías el comisario amigo, el hotelero, de la persona que entra en los domicilios y desaloja a las personas sin orden de allanamiento, y expulsa a la personas.
Y por otro lado, existe el delito de usurpación que persigue a esas personas que ocupan un lugar y muchas veces esas personas no tienen realmente otro lugar en donde vivir. Entonces la legislación esta como al revés, no hay protección de la intimidad familiar del domicilio y si hay castigo para el que ocupa un lugar cuando no tiene otra alternativa. Entonces creo que eso también en la discusión del código penal habría que plantearlo.
Otros puntos del diagnostico, continúan estos planes de renovación urbana, como el de Córdoba, que expulsan a los pobres de centros urbanos. Los servicios públicos, primero que esta red esta todavía bastante limitada. La gente de aguas argentinas que se retiro del país reconoció que en los últimos 5 o 6 años hubo muy poca inversión para la extensión de la red de aguas, pero tampoco hemos podido lograr garantizar una tarifa social. Es decir que aun todos los nuevos barrios y todas las nuevas viviendas, las personas que sean adjudicatarias de estas viviendas no van a poder pagar, en su mayoría la tarifa de los servicios. Entonces es un tema que también entra.
Frente a estos temas nosotros propusimos 12 puntos que deben ser tenidos en cuenta para democratizar las políticas urbanas en Argentina.
Primero, protección legal del derecho de la vivienda en la ciudad. Creemos que se debe promover el dictado de normas a nivel federal, que respetando la autonomía de las provincias establezca un marco jurídico mínimo que proteja los derechos fundamentales humanos en el ámbito de las ciudades. Y a partir de eso, la incorporación de nuevos instrumentos y herramientas jurídicos que favorezcan la regularización de asentamientos informales. Esto estamos hablando de achicar la usucapión, ustedes saben que unos de los medios de regularización es la prescripción impositiva, cuando uno posee un inmueble por mas de 20 años. Creemos que eso es mucho tiempo. Está pensado mas para una Argentina rural del siglo 19, la usucapión urbana en muchos países es entre 5 y 3 años. Es decir, la persona con acreditar 3 años de ocupación de un espacio puede pedir su regularización, la adquisición del dominio. Incorporar también la usucapión colectiva, es decir un barrio completo, una villa que esta en un lugar, después de determinado tiempo pueda pedir su titulación, y no esperar, ya tenemos toda la experiencia del arraigo, con la dificultad que hubo para poder entregar, creo que el arraigo habrá entregado entre el 27 y 30 % de los títulos. Yo estoy ejerciendo el seguimiento del caso de la villa 31, que a pesar de que esta el decreto desde el año 90 todavía no ha sido regularizado.
El segundo punto es la democratización del acceso a la tierra e inmuebles urbanos.
Promovemos la implementación de políticas de recuperación de inmuebles urbanos ociosos y la sanción a la especulación inmobiliaria.
En Argentina y en las grandes ciudades no hay sanciones y hoy esta siendo una fiesta inmobiliaria. Y el sector inmobiliario ahora que ve su negocio llega al techo esta procurando la solución de sus problemas en aumentar el financiamiento. Pero falta la tercera pata, falta el estado regulando, sancionando, interviniendo en el mercado, desestimulando todas estas acciones especulativas
El tercer punto es reconocimiento del derecho a la regularización.
La regularización de asentamientos no solo como una política, sino como un derecho. Cualquier persona que esta en un barrio informal tiene que tener derecho a poder reclamar que se regularice su situación, tener una seguridad jurídica de no ser desalojado. Y esto puede ser por múltiples medios, no solamente por el dominio privado absoluto, hay otros derechos reales como la concesión de uso vitalicio. Es decir, otras alternativas como para dar seguridad jurídica. Hay barrios, por ejemplo en José C. Paz, donde el 70 % de la población no tiene titulo, no tiene posibilidad por los medios que existen legales de poder regularizar. Pese a que la mayoría ha comprado, con boletos de compra- venta, a estas inmobiliarias que lotean en las provincias.
Cuarto punto, los procesos de desalojo no debe violar los derechos humanos.
Proponemos la derogación del delito de usurpación para los casos en que las personas que usurpan son familias que no tienen vivienda, esto no significa alentar las ocupaciones de tierras, pero si buscar otras respuestas desde el Estado que no criminalicen la situación de las personas que no tienen otra forma de encontrar un lugar dónde vivir. Se trata mas bien de utilizar herramientas de la política, como la política social, y en tal caso si hay que hacer una re- localización la intervención de la justicia con un adecuado derecho a defensa de la personas y con una citación obligada que se haga cargo, cuando una persona es desalojada Uds. Saben que el estado paga mucho dinero. Paga los sueldos de los jueces, los papeles de los expedientes, la luz, el aire acondicionado de los tribunales, el salario de los policías, la nafta de los patrulleros. Es decir, para desalojar a una persona el estado gasta mucho dinero, gasta mucho dinero en dejar a una persona en la calle. Y no en solucionar su problema de vivienda, entonces decimos, en los procesos de desalojo, por lo menos, el código penal se tiene que retirar, el código civil tiene que estar, el procedimiento civil, pero tiene que citarse obligatoriamente al estado para que se haga cargo.
Hay un caso interesante que es el caso Bermejo, el juez ordeno al estado, y hasta que no le provee una vivienda alternativa, no ejecutar el desalojo.
Cuatro puntos más: democratización del acceso a los servicios públicos. Ya hablamos de la tarifa social.
La participación de las personas y las organizaciones en las políticas urbanas y de vivienda. Hoy en general las políticas de vivienda se hacen desde arriba, hay inventos de participación. Yo estoy siguiendo algunos casos, por ahí el caso más concreto es el de villa La Cava, donde se hacen concejos de participación donde participan toda la sociedad civil de San Isidro: los Boy Scout, las Damas Patricias de San Isidro, las Damas de Caridad, menos los vecinos de Villa La Cava. Y ahora si han admitido que participe el párroco de Villa La Cava para decir que los vecinos están participando en el plan de urbanización de la villa.
Nosotros creemos que las personas que son afectadas por las políticas deben poder y decidir, opinar, tomas decisiones. Lo mismo que las políticas urbanas
Fortalecimiento de los proceso de autogestión de hábitat, creo que Néstor hizo un alegato muy claro con respecto a esto.
Desarrollo urbano son discriminaciones, hay varios casos en la ciudad de Buenos Aires, judicialmente incluso como la ciudad es una ciudad dividida, creo que ha salido incluso en programas de televisión.
Los trenes del norte de alta calidad, los trenes del sur no es así. Los sistemas de recolección de basura en el norte, hay mas tachos de basura, hay mejores sistemas de limpieza, en el sur no. Es decir, hay desigual distribución de los recursos, ya primero hay una concentración de los pobres y los sectores de alto consumo en distintos sectores de la ciudad, y por otro lado también hay una distribución del gasto publico diferente. Se invierte más en infraestructura para los ricos y menos en infraestructura para los pobres. El tema de la inversión en las ciudades, tal vez con profundizar o hacer realmente vigente la política del presupuesto participativo podría avanzarse en una distribución mas equitativa de las inversiones publicas en el espacio urbano.
Últimos cuatro puntos
Acceso a áreas centrales urbanas, la posibilidad de que en las ciudades, en la planificación urbana en la reglamentación sobre los usos de los espacios en la ciudad se tiene que prever el lugar para personas que son de bajos recursos, para los pobres. Los pobres tiene que tener un lugar en la ciudad y la ciudad no puede ser solo un espacio de especulación de los promotores inmobiliarios, tiene que haber también un lugar para los pobres y un acceso a todos los espacios de la ciudad para todos.
Promoción de políticas urbanas y de vivienda con sentido re distributivo, ya hablamos.
Reforma tributarias, para que la estructura tributaria vigentes a escala nacional, regional y local, puedan, hoy en general tienen un carácter regresivo puedan tener un carácter redistributivo.
Y finalmente la modificación de la ley general de vivienda, para que esta ley que fue pensada en función del sistema de refinanciamiento nada mas, pueda transformarse en una ley que garantice derechos, nada más.

Muchas Gracias

Foro Social Urbano de Tierra del Fuego 10-2006 Experiencia

Campaña Internacional 02 de octubre de 2006 “Día Mundial del Hábitat”

Jornada: "Habitat Social en Argentina"

Solución Integral al Problema Habitacional

Ciudad Universitaria -Aula Magna -Facultad de Arquitectura Pabellón III 3° Piso


Ponencia: Experiencia Foro Social Urbano de Tierra del Fuego

Lic. Silvia Paredes – Lic. Alicia Alcaráz

Muchas gracias a todos, agradecemos particularmente a la gente de El Ceibo que nos convocó y también nos acompaña el Sr. Luis Torres que es el presidente del barrio 2 Banderas (que después veremos imágenes sobre ese barrio) Alicia y yo somos trabajadoras sociales y estamos en esta instancia del Foro desde el mes de noviembre del año 2005, el Foro Social Urbano tal como lo planteaba Darío Duch desde la Patagonia nos está sucediendo lo mismo.

Tierra del fuego es una provincia que tiene 110.000 habitantes, Ushuaia tiene 59.000, recién escuchaba en las otras mesas todos los instrumentos de la democracia y Ushuaia los tiene bastante, porque nosotros somos una provincia relativamente joven, la Tierra del Fuego se provincializó en 1991 en 1993 y ‘94 se crea la comisión de Tierras por el cual la nación les traslada las tierras a la provincia y la provincia a su vez a los municipios.

Esto para nosotros es muy importante porque en realidad ahí fue el hito desde donde se está marcando lo que planteamos, que es la política de exclusión a la que nos someten los gobiernos provinciales o municipales que han pasado desde entonces, porque?, porque cuando se distribuye esta tierra queda tal como había sido en el siglo XIX las tierras las ciudades quedan cubiertas de las grandes estancias de alguna manera quedan ahorcadas entre las cinco o seis familias en algunos casos de terratenientes.

Bueno de esta manera, así van creciendo estas ciudades y con esta impronta de que bueno esto era tierra fiscal lo que era de la nación no era de nadie por lo tanto cualquiera lo podía tomar y así lo tomaron estas familias poderosas y así también fue reproduciéndose la ocupación en ambas ciudades entonces nosotros vamos a ver que por ejemplo en el año 1980 que es el auge de la ley 19.640 que es una ley de promoción industrial, aparece todo un concepto de las fábricas metalúrgicas, las armadoras de televisores y esto trae una gran radicación de familias ya no era solamente lo que se había visto en el siglo XIX-XX que eran familias de origen chileno sino que aparece muchas familias de la Argentina porque había un concepto muy fuerte que tenía que ver con lo geopolítico, si recordamos en el año ’78 se produce un enfrentamiento o un posible enfrentamiento con Chile y bueno esta política es lo que de alguna manera era el discurso de aquel momento había que “argentinizar” la Patagonia y por lo tanto la Tierra del Fuego también.

Esto también primó en este concepto traigamos muchas fábricas y nuestras ciudades en aquel momento eran lindas también, pero no eran turísticas el único turismo que llegaba era algún turismo muy exótico que venían a ver justamente un lugar exótico, nuestra ciudad la de Ushuaia igual que Río Grande eran en los años ’80 ciudades metalúrgicas, en el año 2000 crisis mediante dolarización y todo esto, qué es lo que se produce en Tierra del Fuego, ya estas ciudades no podían ser metalúrgicas porque no le convenía a las empresas mantenerse en este lugar porque ya no le convenía obviamente a pesar de que tenían esta ley 19.640 y esto hace que las empresas se vayan pero la gente quedó, la gente quedó y se producen grandes bolsones de desocupación de subocupación y de pobreza y comienzan estos barrios, lo que había sido en el año ’82 por ejemplo uno de los barrios mas antiguos de Ushuaia que era un barrio que se denomina San Vicente de Pool eran barrio de tránsito y espera se construían barrios hasta que las empresas construyeran los barrios a los trabajadores, esto nunca sucedió entonces los barrios de tránsito y espera se transformaron en estos asentamientos, algunos lograron regularizarse y otros como el barrio Colombo, el Felipe Varela, la Bombonera que es del ’90, ’91 las primeras viviendas, otro sector que se llama Isla de Año Nuevo y otro que se llama el Bella Vista, comienzan a ser asentamientos que nosotros denominamos históricos.

El último asentamiento se produce el año pasado en el 2005 se llama el barrio El Escondido, este barrio igual que Altos de las Cumbres, Raíces y Dos Banderas están en un sector alto de la ciudad, es decir están dentro del bosque y como ya lo decía recién nosotros tenemos muchos instrumentos democráticos como que tenemos un plan estratégico desde el año 1999, tenemos una carta orgánica municipal desde el año 2001, tenemos banco de tierras en la carta orgánica municipal nunca se reglamentó ese artículo, tenemos derechos de ciudadanos, tenemos presupuesto participativo y no se reglamentó ese artículo, tenemos un muy lindo articulo de comisiones vecinales y no se reglamento, tenemos sindicatura del vecino, banca del vecino, defensor del vecino y esos artículos son los que casualmente hasta ahora desde el año 2000 al 2006 no han podido reglamentarse, así que nosotros decimos, por ahí recién escuchamos el problema ha sido la falta de política, nosotros decimos que el problema ha sido de una política muy concreta muy basado en lo económico que es una política de exclusión, esto que nosotros marcamos no es casual porque se reproduce cuando nos preguntamos porqué en 100 años desaparecieron los pueblos originarios, cuando nos preguntamos porque en 10 años nuestra provincia que surge rica con superávit fiscal termina siendo una provincia totalmente endeudada.

Nosotros también nos preguntamos en esto que hay una política de exclusión cuando se van cambiando los modelos de acuerdo a lo que el neoliberalismo está planteando, por eso que decíamos es muy fuerte, en el ’80 éramos metalúrgicos en el 2002 somos turísticos es lo que el modelo dice, por eso es la respuesta que encontramos porque sobra la gente, en ese lugar se discute mucho hoy la capacidad de carga, entonces nosotros las personas somos la capacidad de carga que podría tener esta ciudad y bueno esa capacidad de carga la ciudad no la tolera, no la tolera desde el año 1999, yo recién les contaba que tenemos plan estratégico desde el ’99 y carta orgánica desde el 2001 pero en el año 1999 la ciudad define que va a cerrar lo que en ese momento se denominaba registro de la demanda, o sea la personas podían inscribirse en este registro de la demanda habitacional y era posible que una vez que se urbanizara tuvieran un lote, bueno a partir del ’99 se definió que como había tanto incremento demográfico era necesario que esto lo manejara el mercado así lo dice el decreto por el cual se dio de baja al registro de la demanda habitacional.

Esto fue aprobado después por los concejales esto parece para nosotros como el punto que marco algo porque mientras este decreto da de baja esta posibilidad del registro de la demanda para viviendas unifamiliares, sí decía que era obligación del estado municipal reglar la distribución de tierras para emprendimientos, porque, porque teníamos el auge turístico entonces era necesario emprendimientos, bueno ahora, quiénes eran esos emprendimientos, “New Age Hospitality” se le otorgó mientras no había tierras para la gente 5 hectáreas para que construyeran cerca de los dos grandes hoteles que hay en la ciudad y que también fueron otorgados en esos años y a quien pertenece el New Age Hospitality” y bueno pertenece a una de las grandes familias de la Tierra del Fuego que son en realidad algunos de ellos son testaferros y que no solamente se le otorgan 5 hectáreas para esto sino otras 5 hectáreas de bosque de uso restringido, básicamente la riqueza tiene que estar metida ahí en el medio, paralelamente también se le otorga a otros sectores que nosotros decimos será este proceso que desaparece la posibilidad de vivienda unifamiliar y esto que le comentaba de la comisión de tierras quedan dentro del ejido urbano grandes vacíos y a quien pertenecían, a estas familias que a su vez los venden a otros propietarios generalmente extranjeros o a personas de inmobiliarias nacionales y como son de grandes extensiones donde se puede realizar interesantes barrios comienzan los emprendimientos de barrios privados.

Llamativamente porqué, en Ushuaia el índice delictivo es muy bajo, para nosotros fue muy impactante ver estos barrios privados pero en realidad ellos dicen que no son barrios privados son barrios públicos es decir barrios privados de gestión pública, porque la infraestructura en realidad la pagamos todos para que llegue a esos barrios, ahora estos barrios tienen una zonificación porque no se olviden que nosotros tenemos un plan estratégico, también tenemos un código de planeamiento y dentro de estos barrios la zonificación generalmente es R4 que significa “vivienda country” 50 metros ½ hectáreas para cada uno, esto es posible a pesar de que en algunos casos hemos descubierto que era zona de bosque comunal y sobre el bosque comunal no se debería construir.

La gente del “2 Banderas” de “Las Raíces” está en zona de bosque comunal por eso el municipio intenta echarlos y por eso la gente también les pregunta porque es tan fácil cambiar la zonificación para un último cerro que se hizo hace 15 días atrás se les cambia la zonificación a un sector que ha comprado el Hilton, todas estas cosas que nos han ido generando muchos interrogantes fue también uno de los motivos para que una sociedad poco participativa como la nuestra por primera vez planteara un temática realmente bastante oculta.

Nosotros siempre en Tierra del Fuego es como que hemos aceptado quizás porque hay un condicionamiento de culpabilidad, siempre ha sido, bueno, todos vienen les sacan les extraen con su trabajo el fruto a estas tierras y se van y este lugar ha sido bastante particular nuestra sociedad a pesar que es una sociedad muy joven el promedio de edad de jefe de hogar es 45 años, las familias generalmente es numerosa y esto hace que sea muy contradictorio pero también para nosotros como muy enriquecedor esta experiencia.

Al Foro Social Urbano lo integran la Central de Trabajadores Argentinos, la Asamblea permanente por los Derechos Humanos, el Colegio de Profesionales de Trabajo Social (rarísimo porque las trabajadoras sociales no se metían en estos temas, nos dijeron ellos) los asentamientos Dos Raíces, La Bombonera, el Felipe Varela, barrio El Escondido, también la Asociación de Inquilinos, mucha de la gente que hoy está en los asentamientos es gente que estaba alquilando y son un poquitos mas caros que en Bariloche los alquileres porque los monoambientes cuestan $ 1.000.- (mil pesos) y un empleado del estado gana mil pesos.

Entonces es básicamente imposible vivir y ellos mismos en algunos encuentros nos han planteado que uno de los primeros eslabones para el asentamiento o para la ocupación ha sido justamente el alto costo del alquiler, bueno esta cuestión de exclusión.

Todas las políticas nacionales también son aplicadas en Tierra del Fuego pero siempre van tomando la característica de lo que son los grupos de poder que ya sea el provincial o municipal siempre están respondiendo a una cuestión única que es un interés económico de exclusión, bueno Alicia ahora comentará un poco mas.

Lic. Alicia Alcaraz

Por ahí como llegamos a develar esta realidad que aparece y que queremos compartir con ustedes desde Ushuaia imágenes y vivencias que tuvimos cuando se hizo el primer foro que fue el 10 de diciembre y este foro se hizo desde el espíritu de los que habíamos participado en el Foro Social Mundial que se realizó en Brasil, entonces dijimos nos puede nuclear un Foro Social Urbano, para nosotros es muy importante esto de encontrarnos y pensar con otros.

Se trabajo sobre todo la realidad de los barrios y lo interesante que en esta vez nosotros aportamos un poco lo que es la metodología, la coordinación y la idea era que los barrios hablen no buscar intermediarios ni nada, hicimos experiencias territoriales y como referentes hablaban las mujeres.

En el segundo foro ya se comenzó a trabajar sobre la ley habíamos hecho un primer petitorio donde en el primer foro nos habíamos puesto de acuerdo, regularización dominial ya, recuperar las tierras ociosas, regulación del mercado inmobiliario, expropiación de las tierras de la armada, urbanización a valor fiscal, para todos estos puntos comenzamos a conectarnos con abogados que siempre son bienvenidos más lo que están del lado progresista y un abogado de la CTA nos asesoró en el armado de una ley que lo fuimos debatiendo con la misma gente, hicimos talleres para entender de que se trataba la ley, apropiarnos de esa ley, también tenemos que ver como se aguanta el invierno en estos asentamientos y como impacta en la salud, también tuvimos la visita de Nora Cortina y las Madres de Plaza de Mayo.

Si bien es un movimiento incipiente reciente tenemos menos de un año, queremos sumarnos a las inquietudes de las mesas anteriores en relación que si hay necesidad de acordar trabajar en el intercambio de redes, de experiencias, por la Ley marco, la reforma urbana y a todas las luchas que ustedes vienen de distintos lugares realizando.

Bueno, muchas gracias,

FORO SOCIAL URBANO de TIERRA del FUEGO

Las Organizaciones que integramos el Foro:

Colegio Profesional de Trabajadores Sociales, Organización de Inquilinos, Programa Radial Sangre Barrial, Asociación Civil Barrio Andorras, Centro de Estudios Sociales Fueguinos, Asociación Civil La Comunidad para el Derecho Humano, CTA, Central de Trabajadores Argentinos; APDH, Asamblea permanente por los derechos humanos; Organizaciones Barriales: El Escondido, Dos Banderas, Felipe Varela, Colombo, Las Raíces I y IV, Asociación Civil Enlace de Jóvenes Fueguinos, Organizaciones de la Sociedad Civil y vecinos